Tres gigantes de la construcción ganan licitación para Anillo Vial Periférico de Lima

El Consorcio Anillo Vial Periférico, compuesto por Ferrovial, Sacyr y Acciona, ha sido seleccionado para llevar a cabo el proyecto del Anillo Vial Periférico de Lima (Perú), bajo el formato de concesión. La inversión total para esta infraestructura se estima en US$3.400 millones, incluyendo aportaciones de fondos públicos por parte de la Administración.

El consorcio, liderado por Ferrovial a través de su filial Cintra, posee una participación del 35%, mientras que Sacyr y Acciona cuentan con un 32,5% cada una.

Anillo Vial Periférico (Imagen: Sacyr)

La adjudicación fue anunciada por la Agencia de Promoción de la Inversión Privada de Perú, ProInversión, después del período de noventa días en el que otras empresas interesadas podían participar en la Declaratoria de Interés.

El Anillo Vial Periférico es una infraestructura clave que transformará la capital peruana, integrándose en el esquema de planificación de infraestructura vial a nivel local, regional y nacional. Su objetivo principal es abordar los desafíos de movilidad en Lima y sus alrededores.

Este proyecto incluye el diseño, financiación, construcción, gestión y mantenimiento de una autopista urbana de peaje de 34,8 km, conectando 11 distritos de Lima Metropolitana y uno del Callao, beneficiando a 4,5 millones de habitantes. Además, contará con vías laterales libres de peaje en ambos sentidos a lo largo del trayecto principal para mejorar la conectividad en la ciudad.

Se estima que el proyecto generará más de 70.000 empleos, entre directos e indirectos, durante su fase de construcción, con 5.000 puestos directamente asociados. Durante su operación, se prevé la creación de 20.000 empleos anuales, contribuyendo significativamente al desarrollo económico regional.

El Anillo Vial Periférico incorporará tecnología avanzada, como sistemas de Gestión de la Información de Diseño (BIM), Gestión de Activos y Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS), para garantizar una gestión eficiente y segura de la infraestructura.

La operación de la ruta se llevará a cabo bajo un modelo de Asociación Público-Privada (APP) cofinanciada, donde los ingresos de los peajes cubrirán los costos de operación y mantenimiento, apoyando parcialmente la inversión inicial. El contrato de concesión tiene una duración de 30 años desde la firma, o hasta alcanzar el Valor Presente de Ingresos por Peaje (VPIP) establecido, con posibilidad de extensión si no se alcanza dicho valor en el plazo definido.

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