Las 200 principales constructoras del mundo - versión 2022

A pesar de que la industria de la construcción estaba mucho mejor aislada de los efectos de la pandemia del covid-19 que la mayoría de los otros sectores, de todos modos ella tuvo un impacto negativo en la actividad y las ventas. Esto, por supuesto, varió de un país a otro, ya que los enfoques gubernamentales de los cierres nacionales variaron considerablemente.

Fue debido a esta actividad en China que el último ICON 200 (con ventas 2020) registró ventas totales de US$1,746 billones; casi idéntica a la cifra de la tabla que la precede, que fue de US$1,744 billones. Sin China, las ventas habrían caído en una cantidad razonable, en lugar de aumentar marginalmente.

La lista más reciente (que analiza las ventas para 2021) ocurre cuando la mayor parte del mundo ha salido ya de los bloqueos relacionados con el covid y, por lo tanto, era razonable esperar que aumentaran las ventas totales. Este es sin duda el caso: las ventas del actual Top200 ascienden a la notable cifra de US$1,68 billones, la cifra más alta jamás registrada en la tabla.

La razón del aumento es que el crecimiento se ha visto en todo el mundo. Durante 2021 las ventas se desaceleraron en China en comparación con 2020, pero aún estaban en un buen nivel, y los contratistas del país se beneficiaron del trabajo realizado en todo el mundo a través de la iniciativa Belt and Road. Las ventas para los contratistas chinos aumentaron de US$697.000 millones en 2020 a US$866.000 millones en 2021, lo que equivale al 44% del monto total generado por el listado. Es probable que esta cifra sea menor el próximo año, ya que muchas ciudades chinas experimentarán cierres muy estrictos y el gobierno se esforzará por una política de “cero covid”.

Aún así, en la tabla de este año, los contratistas chinos una vez más ocupan los cinco primeros lugares de la lista y todos reportaron sólidas cifras de ventas con respecto al año anterior.

Es posible que los contratistas chinos, una vez más, hayan impulsado el crecimiento de la tabla, pero ciertamente se distribuyó de manera más uniforme que en el pasado. Los contratistas con sede en EE.UU. vieron aumentar sus ventas totales de US$226.000 millones en 2020 a US$246.000 millones el año pasado. De hecho, algunos de los grandes movimientos en el ranking provinieron de contratistas estadounidenses que trabajan en el sector de la construcción de viviendas. Si bien la demanda de casas ha aumentado en la mayor parte del mundo, el sector registró un crecimiento especialmente fuerte en los EE.UU. De los 33 contratistas estadounidenses de la lista, más de la mitad vieron aumentar sus puestos, algunos significativamente.

Japón es un mercado extremadamente estable en la construcción, por lo que no sorprende que los contratistas japoneses representen casi el mismo porcentaje que el año pasado, del 10,6% al 9,4%; tercera mayor contribución de cualquier país, detrás de China y EE. UU.

Mirando hacia el futuro

La industria de la construcción ocupa un lugar algo extraño en este momento. La demanda tanto de equipos como de proyectos es alta: los gobiernos están impulsando proyectos de infraestructura a gran escala, la construcción residencial está en auge en muchos mercados, la demanda para la construcción de sitios que pueden producir energía más ecológica está aumentando y la construcción de centros de datos está en auge, por nombrar solo algunos sectores. La mayor parte del mundo parece haberse recuperado de lo peor de la pandemia y los niveles de actividad han vuelto a un nivel “normal”.

Sin embargo, hay numerosas nubes oscuras y siniestras en el horizonte: la falta de trabajadores calificados sigue siendo un problema real; las cadenas de suministro permanecen estrechas, a veces hasta el punto de ruptura; la inflación es de cifras de dos dígitos en algunos mercados y aumenta enormemente el costo de los materiales; y si bien el covid parece estar bajo control, la situación podría cambiar, con nuevas variantes aprovechando que la mayoría de los países relajan sus reglas.

La cifra de la tabla de este año de US$1,968 billones es un testimonio de la fuerza y ​​​​la necesidad de la industria de la construcción. El número es más alto de lo que razonablemente se podría haber esperado el año pasado.

Para el próximo ICON 200, es probable que haya una pequeña disminución, un “aterrizaje suave”, como les gusta decir a los economistas, ya que algunos de los problemas enumerados anteriormente se ponen al día con la industria, así como también se siente el impacto de los bloqueos prolongados de China. Con todo lo que está sucediendo en el mundo, una pequeña disminución de la cifra más alta jamás registrada sería otra muestra de fortaleza de los 200 contratistas más grandes de la construcción.

El artículo completo lo puede encontrar en la edición de septiembre/octubre de Construcción Latinoamericana.