Tecnología del acero amplía complejo habitacional en São Paulo

El Conjunto Habitacional Heliópolis Gleba G, proyecto desarrollado por Biselli Katchborian Arquitetos Associados, destaca como ejemplo innovador de arquitectura y urbanismo en la ciudad de São Paulo.

La reciente ampliación del complejo, que tuvo lugar más de 10 años después de la inauguración de la primera fase, se realizó siguiendo el concepto de “bloque abierto” e incorporó nuevos bloques residenciales.

La continuación del Programa de Reurbanización de favelas del Ayuntamiento de São Paulo, a través de la Secretaría de Vivienda, ha dado lugar a la ampliación del Complejo Habitacional Heliópolis Gleba G - Fase 2. El nuevo bloque residencial, compuesto por 221 pisos en cinco plantas, se enfrentaba al reto de la densificación sin la posibilidad de utilizar ascensores. Para superar esta limitación, los arquitectos aprovecharon el desnivel de la calle adyacente e implantaron plantas bajas diferentes para cada edificio, siguiendo los distintos niveles del terreno.

“La implantación de los nuevos bloques mantuvo el concepto de “patio abierto”, proporcionando espacios amplios y diáfanos, redefiniendo la relación entre el edificio, el individuo y la colectividad”, analiza el arquitecto Artur Katchborian. “Una de las principales directrices fue la plena participación de los usuarios finales, algo inusual en este tipo de desarrollo mediado por el Estado”.

Pasarelas en celosía conectan los edificios, mientras que grandes portales marcan los accesos a los patios interiores. Estos espacios se convierten en zonas de vida, ocio y deporte para la comunidad, fomentando la integración social. Se ha mantenido el diseño cromático utilizado anteriormente, que da identidad visual al edificio y acentúa la presencia de los espacios comunes.

La elección del sistema de construcción en acero, con una losa de cubierta de acero, para las pasarelas metálicas aportó eficacia y durabilidad a la obra. “Estas estructuras permitieron repartir las distintas plantas bajas entre las torres, haciendo viable el número de viviendas exigido por la SEHAB, sin necesidad de ascensores”, explica el arquitecto. “El uso del acero permitió superar las grandes luces con perfiles más esbeltos, creando una transparencia que se integra armoniosamente en el paisaje”, añade Artur Katchborian.

El éxito del proyecto, con el uso de acero en las pasarelas, indica que este sistema de construcción podría convertirse en una tendencia para futuras urbanizaciones.

Según el arquitecto, las pasarelas metálicas se diseñaron e integraron en los edificios teniendo en cuenta el reto de la densificación sin posibilidad de verticalización. “Esta solución permitió conectar los edificios y crear patios interiores”, afirma Artur Katchborian. “El análisis de los bomberos llevó a proponer conexiones de hormigón, que actuaban como pilares, y que liberaban las cerchas para salvar los huecos. Esta adaptación dio como resultado una solución muy buena”.

El énfasis en el uso del acero en las pasarelas contribuye a la mejora estética y funcional de la urbanización Heliópolis Gleba G. Además de las pasarelas, otras estructuras metálicas, como las barandillas y las pantallas de protección de los pasillos, mantienen su identidad y protagonismo, añadiendo calidad y belleza a la urbanización.

El éxito del proyecto, con el uso del acero en las pasarelas, indica que este sistema de construcción podría convertirse en una tendencia para futuras urbanizaciones.

El diseño de las pasarelas metálicas se concibió teniendo en cuenta la incidencia solar y la ventilación natural. La transparencia lateral de las estructuras proporciona una ventilación constante desde todos los lados. “Además, las tejas sándwich reducen el efecto de la radiación solar, garantizando un entorno más confortable para los residentes”, afirma el arquitecto.

Se ve que el proyecto buscaba garantizar una mejor incidencia solar y una buena ventilación en los espacios entre los edificios. El máximo retranqueo entre las torres permitió un mayor aprovechamiento de la luz solar. El patio interior, que actúa como extractor convectivo de aire caliente, contribuye a la circulación del aire, creando un entorno más fresco y agradable.

Las principales repercusiones sociales, urbanísticas y arquitectónicas previstas a largo plazo incluyen una mejora general de la calidad de la vivienda y una mayor valoración del espacio urbano. Foto: CBCA

Artur Katchborian explica que las pasarelas metálicas contribuyen al confort y la calidad de vida de los residentes, proporcionando una circulación fluida entre los edificios. “La posibilidad de pasar directamente de planta baja a planta baja, sin salir del condominio, a través de estos increíbles espacios, que se formaron a partir del posicionamiento de los edificios, garantiza una experiencia única y facilita la interacción entre los residentes”, analiza.